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Los videojuegos, diversión que requiere orientación

Publicado: 2011-08-11

Para un uso seguro y responsable

Continuamente venimos comentando la importancia que las TIC representan para el desarrollo personal y educativo de niños y jóvenes; pero también es importante conocer los riesgos que puede conllevar el uso de la tecnología sin una adecuada supervisión parental.

Hoy me referiré específicamente al uso de videojuegos y sus implicaciones en el desarrollo personal de los menores, grupo especialmente vulnerable por su edad, inexperiencia e inmadurez.

Cabe recalcar que estos riesgos son más comunes de lo que quisiéramos en el entorno real, pero trasladados al entorno digital pueden llegar a tener mayores repercusiones.

A. Uso y abuso

El entusiasmo que sienten los niños y jóvenes al jugar, sin la supervisión y orientación adecuadas, puede dar paso a un uso excesivo y descontrolado que a la larga puede originar sedentarismo y en casos extremos, ruptura con la vida social.

Algunos rasgos a los que podemos estar atentos son: se muestran absortos al jugar, no apartan la vista de la pantalla y no prestan atención a lo que sucede a su alrededor, tensión excesiva, pérdida de interés por otras actividades, falta de respeto por los horarios establecidos, trastornos del sueño, distanciamiento de la familia y amigos.

El realismo en los videojuegos, la creación de mundos virtuales mucho más atractivos que el mundo real, los dispositivos portátiles y la búsqueda de fidelización por parte de las empresas responsables de estos productos suelen reforzar estas conductas.

B. Contenidos inapropiados

Los contenidos de los videojuegos pueden ser inapropiados para los menores por tres motivos principalmente: si su interpretación es tan compleja que confunde al niño la realidad con la ficción, si fomenta conductas negativas (asesinatos, violencia, discriminación, uso de drogas, etc.) y si muestra comportamientos adultos (sexuales, de juegos de azar, etc.).

Aunque existen indicadores de contenido por edades, la verdad es que es muy fácil que los menores accedan a videojuegos con contenidos inadecuados debido a la distribución por la red de manera legal pero inapropiada.

C. Amenazas de privacidad

El funcionamiento y la calidad de los servicios en red requieren el manejo de la información personal de los usuarios, quienes ceden sus datos con el riesgo de que se les dé un uso indebido.

Esto puede suceder de diferentes formas: completando fichas de registro para acceder a contenidos, por interceptación de la conexión entre el usuario y el proveedor por un tercero y los registros de actividad que se guardan en los equipos (principalmente si se hace uso de cabinas públicas).

D. Ciberbullying

Se refiere al acoso que puede hacerse a través de la red, se entiende por acoso las acciones de chantaje, maltrato e insultos entre menores.

Muchos de los videojuegos en línea presentan la opción de conversación entre los jugadores (a través de texto o voz), lo cual puede dar opción a las amenazas y al uso de lenguaje soez durante el juego.

E. Grooming

Es el nombre con que se conoce al uso de estrategias que emplea un adulto para ganarse la confianza de un menor a través de la red con fines de índole sexual.

La forma en que un adulto puede entrar en contacto con un menor a través de una plataforma de videojuegos es muy simple pues basta con burlar la verificación de la edad. El fin es obtener imágenes más o menos explícitas (en algunos casos concertar una cita en el mundo real) a cambio de algún premio u otros juegos.

Consejos para un uso responsable y seguro

De la misma forma que en cualquier aspecto de la educación de nuestros hijos y estudiantes, lo más importante es la búsqueda de un espacio de confianza y responsabilidad compartida con ellos. En este caso en particular tengamos en cuenta:

Supervisar la compra de productos en relación al nivel de madurez de los chicos.

Verificar y seguir las instrucciones de instalación especificadas en el producto. Hacer uso de espacios comunes del hogar evitando que se aíslen en el dormitorio por muchas horas.

Mantener vigilancia de los juegos que usan fuera del hogar (en casa de amigos, en cabinas públicas).

Establecer horarios de uso en relación al tiempo libre que tienen y las actividades que realizan.

Hablarles de la importancia de conservar sus datos privados y los de la familia en general.

Instalar herramientas de seguridad en los equipos (antivirus, cortafuegos, control parental, bloqueador de páginas, entre otras).

Crear cuentas de usuario para los menores, si es que se comparte el mismo equipo con los adultos, a fin de evitar que puedan acceder a información importante de los mayores.

Recomendación final

Al comprar un videojuego compruebe que sea adecuado para el menor y esté en relación con su desarrollo personal. Revise la catalogación que debe aparecer en la portada (por esto es importante la adquisición de productos originales) para verificar a la que corresponde, también puede acceder a esta información a través de internet.

Publicado originalmente en PerúEduca


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